Los efectos producidos al fumar la White Widow se corresponden con los de las mejores plantas de dominancia sativa, ofreciendo al consumidor un colocón brutal, casi psicodélico. Los fumadores podrán sentirlo en su cabeza, inundados por una gran sensación cerebral. Su sabor es limpio y fresco como el pino, con un toque cítrico al exhalar, que se convierte en una fumada vigorizante y sabrosa.