Descripción
Historia de las trufas Atlantis
Las Trufas Atlantis fueron descubiertas en el estado de Georgia, en Estados Unidos. Por ello, su nombre científico es Tampanensis Georgia. Esta especie, denominada coloquialmente como ‘Fruta de la Utopía’, ha sido siempre muy codiciada por los investigadores micológicos, ya que solo puede encontrarse en este estado y en algunas zonas de Arkansas.

En un primer momento se relacionó esta variedad con la Psilocybe Cubensis Mexicana, aunque se descubrió recientemente que la Atlantis es una Psilocybe Tampanensis, un tipo de hongo de diferente origen.

En primer lugar, cabe destacar que estas trufas se venden con propósitos ornamentales o de estudio micológico. Bajo ningún concepto son aptas para consumo humano.

Una ingesta accidental de estas trufas podría generar los siguientes efectos:

Luces, colores y experiencias ópticas alteradas
Efectos visuales muy pronunciados
Introspección y análisis exhaustivo del ego
Creatividad aumentada
Los efectos se podrán sentir entre 15 y 45 minutos después de su ingesta, alargándose en el tiempo entre 3 y 6 horas.

Método de conservación
Las trufas pueden conservarse en su envase original sin abrir durante un mes en la nevera.
Una vez abierto, perderán sus propiedades en un máximo de 3 días.
Para conservarlas a largo plazo, secar las trufas. En este caso pueden durar alrededor de 2 años dentro de un recipiente hermético en un lugar fresco, seco y oscuro.
Recordar que las dosis de trufas secas y frescas son diferentes.
Contenido del paquete: 15 gramos de trufas Atlantis.